Consecuencias ocultas de los robos en comercios y por qué es necesaria una seguridad fiable en los comercios

En 2023, algo menos de 5.000 comercios minoristas cerraron, y una cantidad considerable de ellas lo hizo debido a robos desenfrenados. Aunque es difícil precisar cuántas cerraron debido al hurto organizado, algunos minoristas como Dollar Tree y Target no han sido tímidos a la hora de revelar que algunos de sus establecimientos simplemente no pudieron encontrar una solución a los hurtos y, como resultado, tuvieron que interrumpir sus operaciones.

Como propietario de una pequeña o mediana empresa, es posible que piense que esto sólo les ocurre a los grandes minoristas, o que no dispone de presupuesto para implantar múltiples soluciones antirrobo. Si ha estado haciendo la vista gorda o esperando a que se produzca una pérdida catastrófica para invertir en seguridadprobablemente esté perjudicando a su propio negocio.

En este blog, analizaremos cómo el hurto en el comercio minorista afecta no sólo al minorista, destacando el papel fundamental de los dispositivos antirrobo para proteger algo más que el inventario.

El impacto negativo del robo desenfrenado en el comercio minorista

Todos sabemos que los hurtos perjudican a las tiendas, y esto a veces hace que la gente haga la vista gorda. "Yo no compro allí de todos modos, así que no me afecta". Es una actitud fácil de adoptar cuando un problema no nos afecta de cerca, pero el hurto en tiendas tiene efectos de largo alcance que repercuten no sólo en el comercio, sino también en la comunidad circundante: 

• Aumento de los precios: Es un hecho, y a menudo esperado. La pérdida de mercancía o los daños sufridos por las tiendas las llevan a subir los precios para recuperar las pérdidas. Aunque el seguro puede cubrir algunas de estas pérdidas, existen franquicias, primas más elevadas y posibles retrasos en el reembolso. El golpe financiero global anima a los minoristas a trasladar estos costes a los consumidores a través de precios más altos.

• Pérdida de puestos de trabajo: Si los hurtos no pueden reducirse hasta el punto de obligar a las tiendas a cerrar, significa que hay menos puestos de trabajo disponibles en la comunidad. Esto puede tener un efecto dominó, que lleve potencialmente a la desaparición de comunidades enteras a medida que las familias se trasladan a otros lugares en busca de trabajo o a barrios donde puedan comprar con seguridad sin temor a robos violentos.

• Aumento de impuestos: El cierre de tiendas implica menos ingresos fiscales locales y estatales, lo que puede llevar a las administraciones a subir los impuestos para compensar el déficit.

• Mayor carga de trabajo para las fuerzas de seguridad locales: Los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley ya están escasos de personal y sobrecargados de trabajo. Si las tiendas no pueden aplicar medidas antihurto para reducir los robos, la carga recaerá en las fuerzas del orden y el sistema judicial, lo que sobrecargará aún más un sistema ya de por sí sobrecargado.

• Pérdida de pequeñas empresas: Las pequeñas empresas o tiendas "mom and pop" se consideran la columna vertebral de Estados Unidos. Contribuyen a una cultura diversa, impulsan la innovación a través de una competencia sana y proporcionan cerca del el 50% de todos los empleos. Si las empresas locales no pueden hacer frente a los retos de seguridad del comercio minorista, podría llegarse a una situación en la que sólo quedasen las grandes empresas, lo que podría dar lugar a monopolios y limitar las opciones de los consumidores.

• Un entorno desagradable para los clientes: La cobertura de los robos con violencia inunda las noticias y causa auténtica preocupación. Nadie debería tener que comprar alimentos o productos de primera necesidad temiendo un robo violento. Sin embargo, unas medidas de seguridad demasiado agresivas también podrían disuadir a los clientes y alejarlos de las tiendas físicas para que compren por Internet.

Los efectos negativos del robo desenfrenado en el comercio minorista van mucho más allá de las pérdidas inmediatas que sufren los minoristas. Se extienden por toda la comunidad, afectando desde a las economías locales hasta a la seguridad pública. Como hemos visto, estos problemas ponen de manifiesto la necesidad de medidas de seguridad eficaces.   

El impacto oculto de unas medidas de seguridad fiables en el comercio minorista

La seguridad en el comercio minorista no se limita a proteger sus existencias, sino que desempeña un papel clave en el mantenimiento de la salud y la vitalidad de su negocio y su comunidad. A pesar de las importantes pérdidas económicas que muchos pequeños comercios sufren cada mes a causa de los robos, el 7% afirma no disponer de medidas de seguridad.

A continuación, exploraremos cómo la implantación de la seguridad en tiendas aporta beneficios ocultos que van más allá de la mera protección, ofreciendo valiosas ventajas para su negocio y su entorno. 

1. Proteger sus existencias
Una de las principales razones para disponer de una seguridad sólida es proteger sus existencias. Los comercios minoristas se enfrentan a riesgos como el robo y el vandalismo, que pueden provocar pérdidas importantes. Instalar cámaras de vigilancia, disponer de sistemas de alarma y contratar personal de seguridad son algunas formas de mantener a salvo el inventario. La seguridad de los productos ayuda a evitar la escasez de existencias y a que el negocio funcione sin problemas.

2. Crear un entorno de compra seguro
La seguridad no sólo consiste en proteger el inventario, sino también en garantizar que los clientes se sientan seguros. Cuando los compradores saben que se encuentran en un entorno seguro, es más probable que visiten su tienda y realicen compras. Las buenas prácticas de seguridad, como tener personal de seguridad visible y cámaras bien situadas, contribuyen a que la experiencia de compra sea más agradable y pueden ayudar a evitar incidentes molestos.

3. Abordar el robo interno
El robo interno, o robo por parte de los empleados, puede ser un gran problema. No se trata sólo de objetos físicos, también puede haber fraude o descuentos no autorizados. Establecer medidas de seguridad sólidas, como auditorías periódicas y políticas claras, puede ayudar a prevenir comportamientos deshonestos. Un sistema de seguridad bien pensado facilita la detección y resolución de problemas antes de que se conviertan en problemas graves.

4. Reducir los riesgos financieros
Los costes asociados a una seguridad deficiente pueden acumularse rápidamente. Además de las pérdidas directas por robo, puede tener que hacer frente a primas de seguro más elevadas y a gastos legales. Invertir en seguridad puede ayudar a mitigar estos costes, protegiendo su cuenta de resultados. Una buena configuración de seguridad también puede reducir la necesidad de reparaciones de emergencia y ayudar a mantener los gastos bajo control.

5. Cumplir los requisitos legales
A veces, la seguridad no es sólo una buena práctica, sino un requisito legal. Dependiendo de su ubicación y del tipo de tienda, puede haber normas específicas que deba cumplir. Cumplir estas normas no sólo le ayuda a evitar problemas legales, sino que también demuestra su compromiso de mantener un entorno seguro tanto para los clientes como para los empleados.

6. Proteger la información digital
En el mundo digital actual, la seguridad va más allá de la protección física. Las filtraciones de datos y los ciberataques pueden poner en peligro la información confidencial de los clientes. Proteger sus activos digitales con medidas como sistemas de pago encriptados y software actualizado es crucial. Mantener la seguridad de sus datos contribuye a generar confianza entre sus clientes y protege a su empresa de costosas infracciones.

7. Reforzar la reputación de su marca
La forma en que gestiona la seguridad puede afectar significativamente a la reputación de su marca. Las tiendas conocidas por su seguridad suelen ser consideradas más fiables. El boca a boca positivo y las buenas críticas de los clientes pueden ser consecuencia de una fuerte presencia de seguridad. Por otro lado, los fallos de seguridad pueden dañar la imagen de su marca. Invertir en seguridad contribuye a una reputación sólida que atrae y retiene a los clientes.

8. Estar preparado para emergencias
Una buena seguridad también significa estar preparado para las emergencias. Ya se trate de una catástrofe natural, una crisis sanitaria u otro acontecimiento inesperado, contar con un plan es importante. Una preparación eficaz para emergencias incluye procedimientos claros, formación del personal y planes de comunicación para gestionar las crisis sin problemas y minimizar las interrupciones.

9. Apoyo a la comunidad
Una seguridad eficaz en el comercio minorista no sólo beneficia a la empresa, sino que también tiene un impacto positivo en la comunidad. Cuando los comercios son seguros y pueden funcionar sin problemas, contribuyen a crear un entorno local más seguro y dinámico. Esta seguridad ayuda a crear una sensación de estabilidad, fomentando un mayor tráfico peatonal y apoyando eventos e iniciativas locales. Además, al reducir la delincuencia y el vandalismo, las fuertes medidas de seguridad ayudan a fomentar una comunidad en la que los residentes se sienten más seguros e implicados. Esta sensación colectiva de seguridad puede mejorar la calidad de vida en general, haciendo que los barrios sean más atractivos y resistentes.

10. Proteger los puestos de trabajo y a los empleados
La seguridad en el comercio minorista es crucial para salvaguardar no sólo el inventario, sino también los puestos de trabajo y el bienestar de los empleados. Unas medidas de seguridad eficaces ayudan a evitar robos y actos vandálicos que, de otro modo, podrían provocar el cierre o la reducción de la plantilla. Cuando los comercios sufren menos pérdidas, es más probable que permanezcan abiertos y sigan contratando personal.

Un entorno de trabajo seguro eleva la moral y la satisfacción laboral de los empleados. Es más probable que los empleados se sientan valorados y seguros en su lugar de trabajo cuando saben que su empresa se compromete a protegerlos. A su vez, esto contribuye a reducir las tasas de rotación y a aumentar la estabilidad de la plantilla. En general, invertir en la seguridad de los comercios contribuye a crear un entorno más seguro y propicio tanto para los empleados como para sus familias. 

Al garantizar un entorno seguro, usted protege a sus empleados, contribuye a la prosperidad de la comunidad y mejora la estabilidad de sus operaciones. A medida que seguimos explorando las ventajas de la seguridad en el comercio minorista, queda claro que estas medidas son esenciales para mantener no sólo una experiencia de compra segura, sino también un ecosistema empresarial próspero y resistente. 

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